jueves, 22 de mayo de 2008

Librepensador Nº3


2 comentarios:

Anónimo dijo...

Como dice San Martín:"La patria no hace al soldado para que la deshonre con sus crímenes ni le da armas para que cometa la bajeza de abusar de esta ventaja, ofendiendo a los ciudadanos con cuyos sacrificios se sostiene”. Creó que la afirmación sostenida bajo esta premisa es el sentir generalizado de todo un pueblo, de un pueblo, conciente con convicciones, altruista y hasta de cierta forma heroico, de un pueblo invencible que aunque reciba mil golpes jamás será silenciado, de un pueblo que está dispuesto a ser condenado por creer quizás en una utopía de un chile justo y con equidad social, porque al parecer en este país creer en la justicia social y no quedarse en la resignación es un crimen. Pues si es así con el ímpetu invencible de mi espíritu idealista les digo: “Soy culpable de luchar por una sociedad de igualdad, por una educación pública y de calidad… En fin culpable de querer hacer posible de este Chile un Chile justo y si esto es un crimen…Condénenme”

Editorial dijo...

Compartimos tu sentimiento: Prácticamente siempre aquellos que luchamos por cambiar las cosas, por mejorar el país, somos criminalizados. Pero eso nos da más fuerzas, más ganas de cambiar el mundo y, aunque lo nieguen los miedosos y los poderosos, nuestro único límite (si es que es un límite) es la muerte.